jueves, 13 de mayo de 2021

Presencia literaria en la serie “El desorden que dejas” (I)

 En la serie española “El desorden que dejas” estrenada en Netflix en 2020 la literatura tiene una presencia importante. Su guión parte de una novela homónima (publicada en 2016 por la editorial Espasa y que se alzó con el premio Primavera de Novela de ese año) de su mismo creador, Carlos Montero, natural de Celanova (Ourense).

Sus protagonistas son dos profesoras de literatura, Raquel, que viene a sustituir a “Viruca” (así se conocía a Elvira, una profesora de literatura gallega que tuvo Carlos Montero cuando estudió, precisamente, en ese instituto), que se suicidó semanas antes, que trabajan en el instituto de Novariz (trasunto de Celanova, y formado a partir de las terminaciones de Celanova y Allariz). Raquel investigará las turbias circunstancias que envuelven la muerte de su predecesora, y en las que intervienen ciertos alumnos suyos.

La serie está rodada en Galicia, con especial protagonismo para la provincia de Ourense: Celanova (el instituto Celso Emilio Ferreiro, que toma el nombre de un destacado poeta gallego, ubicado en el Monasterio de San Rosendo es uno de los más hermosos de Galicia; la cafetería que está enfrente del instituto, Bohemia en la realidad), la Ribeira Sacra y los cañones del Sil, las termas de Bande, Allariz y Ribadavia.

 También tiene presencia la ciudad de A Coruña (ciudad donde vive Raquel antes de ir a trabajar como profesora; la biblioteca de la Escuela de Idiomas que se convierte en la sala de profesores del instituto) y algunos de los montes y paisajes de su provincia, como el de Chelo, en Coirós.

En la serie aparecen constantemente lugares repletos de libros: las estanterías de las casas de Raquel y Viruca, la biblioteca y la sala de profesores del instituto; incluso en una escena del primer capítulo sirven de soporte para apoyar una copa de vino mientras se relaja en la bañera la actriz Inma Cuesta.

Otro guiño literario que aparece en la trama es que la pareja de Raquel trata de ser escritor aunque se acabe convirtiendo en empresario de la hostelería.

No hay comentarios:

Publicar un comentario